Reflexiones de una pieza forzada

Hoy me vuelvo a sentir como muchas otras veces, como reza el título, recurro a una de las letras de un grupo sevillano de rap Dogma Crew, me siento como una pieza forzada, una pieza que no encaja en este puzzle social, y que ha sido encajada a martillazos.

Parte de culpa, reconozco que la tengo yo, quizás a veces me falta empatía, quizás a veces me aíslo en mi propio mundo al ver que lo que me rodea me molesta, pero otras veces pienso, y maldita sea, por qué será que pienso, eso digo yo, pienso demasiado y me planteo cosas que la gente ve tan normal, o simplemente será que está escrito en mis genes, mi cerebro está programado para ir en contra del resto a veces, desincronizado otras.

Es por eso quizás que mis planes para semana santa se fueron al garete, es por eso a lo mejor que mi rendimiento académico se va a pique, y es porque no consigo «conectar» con las personas de mi alrededor, pienso demasiado, le doy demasiadas vueltas a las cosas.
Aunque modestia aparte, siempre he solido ser una persona bastante tolerante con el pensamiento de los demás, me he vuelto demasiado intolerante con las personas ignorantes y no es que yo sea un sapientísimo, pero me he dado cuenta de que soy una persona muy difícil de conocer, incluso entre la «gente friki» (friki, palabra devaluada a los largos de los años) me siento muchas veces como un bicho raro.

Vuelvo a repetir que no me considero experto en nada, muchas veces si que puedo parecer un poco altivo, pero es lo que otra gente puede concebir como «orgullo propio», pero parece que mi cabecita desde hace un tiempo, ha empezado a ir por otros senderos, donde la gente normal no se aventura, eso hace que mi mente funcione de manera distinta y como dice Haruhi Suzumiya «No estoy interesada en la gente aburrida normal» , las series de moda no me suscitan ni el mínimo interés, las series poco conocidas o rebuscadas sin embargo me chiflan.

He llegado a hacer cosplay de «El hombre que ríe» en un salón del manga, acompañado de un amigo que llevaba atada cual pañuelo la bandera de «Zeón» de «Mobile Suit Gundam», y que nos reconocieran alrededor de unas 10 personas y exagero.

A partir de aquí es cuando comencé a darme cuenta de que mis amigos y yo, estabamos construyendo una realidad bien distinta a la que nos rodea. He aquí el debate filosófico de lo que es la realidad, un buen amigo me dijo, que el mundo en sí, la realidad, la sociedad, realmente no existen, el mundo, la realidad y la sociedad es la que tú mismo te construyes.

Creo que no podría estar más de acuerdo, a pesar de que no me considero el más friki del mundo, competición estúpidamente supina, la de creerse el más friki de la tierra, por cierto, me gustaría ahondar ahora un pequeño análisis o crítica de lo que llamamos actualmente friki.

En mi opinión, creo que los frikis siempre han surgido en rechazo a lo que la sociedad da establecido como ocio, aficiones, etc. Pero si nos paramos a comparar a lo mejor lo que hace por poner un ejemplo, una persona «normal» los fines de semana con las que hace un friki hoy en dia, podemos ver que en el fondo no hay demasiada diferencia, tan sólo hay que ponerle la coletilla «friki» al final y ya tenemos lo que andábamos buscando, que hay un botellón, no pasa nada, lo llamamos «botellón friki» y arreglado, distinto nombre, la misma mierda.

¿Qué ha sido de las maratones de anime? ¿De las quedadas para viciarse a la consola/pc en casa de un amigo? Por ejemplo.

Muy seguramente se sigan haciendo todavía.

Otro caso es por ejemplo el de las famosas «redes sociales», poco a poco, silenciosamente, toda la gente a mi alrededor, excepto amigos de confianza, han ido siendo devorados por esa cosa llamada «tuenti», ¡sí hazte un tuenti, todos los tienen!, si me dices eso, problamente te acabe contestando ¿y?
Es curioso, pero el efecto «todos lo tienen» casi nunca me ha hecho efecto, ni siquiera de niño, surgía la moda del patinete, me daba igual tenía patines, que todo el mundo se compraba la «plei» (Playstation 2), me daba igual, a mi me gustaba la Game Cube, ¿por qué tendría que anteponer mis gustos a los del resto del mundo?

¿Por qué me tengo que registrar en un sitio que me parece sinceramente hostil?
Donde se tiende a imitar lo que la gente «normal» hace con el método «coletilla friki», donde se postean las fotos del último botellón (las cuales pasan a ser propiedad intelectual de tuenti y su dueño, seguro que nadie sabe que el fundador es el director de marketing de Google España, y pondría la mano en el fuego a que el 99% de las personas no han leído el aviso legal), sitio donde las normas de ortografía brillan por su ausencia, hipocresía a tu alrededor, gente que tiene de «amigos» a personas con las que se cruzaría en la calle y ni las saludaría, y mucho menos acordarse de su cumpleaños, de no ser porque una simpática función de la web te recuerda. Aunque he de decir, que en función de publicidad no podría sino ser más que efectiva, y es aquí donde te das cuenta para lo que de verdad fue creado tuenti, publicidad, publicidad, publicidad, money, $,€, nunca había sido tan fácil publicitar un evento organizado por una asociación, tan sólo sube una imagen y «etiqueta» a chorrocientas personas, o crea un evento e invita a tu colección de más de 200 contactos, que cuando la miras, ocupa más de 16 páginas. Eso sí, no entiendo mucho de publicidad, pero aún así, si lo que anuncias no es de interés del público, finito.

Así poco a poco, lo que antes era una libertad que tenías ante tí, ¡¡oooh el internet!! ¡¡vasto y extenso como el oceáno!! ¡qué bucólico! se reduce a una visita periódica a tuenti, y de ahí no salgas. Tan sólo has de asomarte por una sala de informática de Rabanales, ahí verás a todos mirando sus tuentis absortos. Luego al exponer esta visión «tan extremista»(como me dice un amigo) de la realidad, se me tacha de tener una mente cerrada, de que me excluyo del mundo que no me gusta, tal como dije al principio, en parte es cierto, pero por otra parte, no es tan cierto, ¿qué pasa si tú me propones tuenti, y yo te propongo twitter? La reacción, previsible, yo a ti, no te voy a convencer a usar twitter ni a tú a mí de usar tuenti, ¿quién es más cabeza hueca? ¿Ahora quién tiene una mente más cerrada tú o yo? ¿Interesante verdad?

Entonces, ¿es cierto que me recluyo en mi mundo? Ya no está la cosa tan clara, si lo enfocamos desde mi punto de vista, yo vivo en un mundo normal, y vosotros vivís recluídos en vuestro propio mundo en tuenti. Todo es siempre relativo.

Este texto está escrito conforme ha ido saliendo de mi cabeza, no tiene ninguna intención de llegar a una conclusión final. Es más dudo que hayas llegado a leer hasta aquí :D, y si has llegado, te aprecio querido lector, de verdad, así que no te costará poner un comentario xD